El significativo incremento de la siembra directa en Argentina y la anticipación de las fechas de siembra en suelos más fríos y húmedos generó condiciones favorables para la difusión del downy mildew una de las enfermedades potencialmente más destructivas del girasol causada por el hongo Plasmopara halstedii. Si bien existen cultivares de buen comportamiento frente al patógeno la obtención de nuevas fuentes de resistencia reduce el riesgo de vulnerabilidad asociado al origen común del germoplasma. El objetivo del estudio fue detectar nuevas fuentes de resistencia a downy mildew en el germoplasma de INTA Pergamino tanto en materiales locales como exóticos. Se analizó la reacción de 1062 entradas de germoplasma de girasol de la EEA Pergamino frente downy mildew. Los análisis se realizaron en el laboratorio de Fitopatología EEA Pergamino desde el año 2001 al 2008 a través del método de inoculación de radícula (Gulya et al . 1991b). Solo el 17% del total de líneas evaluadas fue resistente a downy mildew. En el grupo exótico se obtuvo 199% de líneas resistentes en el Local 034% y en Local × Exótico 229%. En el grupo exótico la resistencia provino de HA 335/HA 412(con resistencia a razas 700 730 y 770) y de ND (North Dakota con resistencia a imidazolinonas). En el local la resistencia provino del compuesto P1 de la EEA Pergamino y en el grupo Local × Exótico de EstanzuelaxMP 557/ Negro Bellocq/KLM/HA 300 HA 341/ PEREDOVIK/P1 y P1/KLM/HA 300. Se obtuvo un buen 'screening' de líneas de INTA para identificar nuevas fuentes de resistencia a la raza 770 de Plasmopara halstedii. La combinación de los grupos Local × Exótico fue la que permitió obtener el mayor número de materiales resistentes. Debería aumentarse el número de selecciones a partir EstanzuelaxMP 557/ Negro Bellocq/KLM/HA 300 por su buena performance y diferente origen. Los resultados son provechosos para el programa de mejoramiento de INTA. Se continuará con estudios para identificar los genes involucrados en la nueva fuente de resistencia. La detección de nuevas fuentes de resistencia permitirá incorporar el carácter a otros materiales reduciendo la vulnerabilidad del germoplasma frente a la enfermedad